Penitenciarios desactivaron una batalla campal en Almafuerte
El hecho ocurrió este martes y un reo resultó herido.
Miercoles, 4 de Octubre de 2023
Un violento enfrentamiento se produjo este martes por la tarde entre dos facciones de presos del Complejo Penitenciario Almafuerte. Rápidamente el personal penitenciario tuvo que intervenir en la pelea mediante el uso de armas reglamentarias, se realizaron casi disparos con balas de goma.
Ante este hecho un interno resultó herido por el impacto de un proyectil antitumulto. La principal hipótesis que se maneja, es que el conflicto surgió a partir de un cruce de los líderes de los pabellones más conflictivos del penal, por la venta de estupefacientes.
Según fuentes cercanas, el cruce se produjo entre dos facciones de reos de los módulos 4 y 3, respectivamente, de la cárcel ubicada en la localidad de Cacheuta, Luján de Cuyo.
Por otro lado penitenciarios relataron que todo empezó cuando unos 130 internos aproximadamente del 4.1 (módulo/ala) habrían salido al campo de deportes del complejo y se cruzaron con unos 20 o 30 privados de la libertad del 3.1 que desarrollaban tareas de siembra en uno de los perímetros de ese sector.
A partir de allí se inició una pelea entre una porción de los convictos del 4.1, conformada aproximadamente por unos 80 o 90 internos, contra la veintena que hacía tareas de jardinería del 3.1, explicaron desde la prisión.
Producto del enfrentamiento, un grupo de guardias hizo uso de escopetas con el objetivo de disuadir a los hombres que protagonizaban los ataques. Gritos, corridas y detonaciones captaron la atención de los reos de otros sectores, que captaron el momento con sus celulares.
En el penal se vivieron momentos de extrema tensión, ya que algunos reos estaban recibiendo las visitas de sus familiares, motivo por el que había mujeres y niños que se vieron invadidos por el temor. Asimismo, estaban presentes en las inmediaciones los docentes que dictan clases en la cárcel.
Las tareas de los guardiacárceles se extendieron a lo largo de una hora, en la que debieron controlar a un centenar de presos y trasladarlos hacia su respectivo lugar de alojamiento.
Además, uno de los internos resultó con una herida de posta de goma en el pecho, mientras que también algunos penitenciarios sufrieron lesiones que no revistieron gravedad.
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